jueves, 10 de noviembre de 2011

Primeros Años del cine en México



EL cine llegó a México casi ocho meses después de su triunfal aparición en París. La noche del 6 de agosto de 1896, el presidente Porfirio Díaz, su familia y miembros de su gabinete presenciaban asombrados las imágenes en movimiento que dos enviados de los Lumière proyectaban en uno de los salones del Castillo de Chapultepec.El cinematógrafo fue presentado al público el 14 de agosto, en el sótano de la droguería "Plateros", en la calle del mismo nombre (hoy Madero) de la ciudad de México. El público abarrotó el sótano del pequeño local -curiosa repetición de la sesión del sótano del "Gran Café" de París donde debutó el cinematógrafo- y aplaudió fuertemente las "vistas" mostradas por Bernard y Veyre. La droguería "Plateros" se localizaba muy cerca de donde, unos años después, se ubicaría la primera sala de cine de nuestro país: el "Salón Rojo".
Se puede considerar a Porfirio Díaz como el primer "actor" del cine mexicano. La primera película filmada en nuestro país, El presidente de la república paseando a caballo en el bosque de Chapultepec (1896) resultaba indicativa de otra característica del nuevo invento: mostrar a los personajes famosos en sus actividades cotidianas y oficiales. La coronación de Nicolás II de Rusia había inaugurado esta tendencia pocos meses antes.
Durante 1896, Bernard y Veyre filmaron unas 35 películas en las ciudades de México, Guadalajara y Veracruz. Entre otras cosas, los franceses mostraron a Díaz en diversos actos, registraron la llegada de la campana de Dolores al Palacio Nacional, y filmaron diversas escenas folclóricas y costumbristas que muestran ya una tendencia hacia el exotismo que acompañaría al cine mexicano a lo largo de su historia. El mismo año llegó también el vitascope norteamericano; sin embargo, el impacto inicial del cinematógrafo había dejado sin oportunidad a Edison de conquistar al público mexicano. 

 LA REVOLUCION
La revolución mexicana contribuyó enormemente al desarrollo del cine en nuestro país. Por circunstancias cronológicas, la revolución fue el primer gran acontecimiento histórico totalmente documentado en cine. Nunca antes un evento de tal magnitud había sido registrado en movimiento. La Primera Guerra Mundial, iniciada cuatro años después del conflicto mexicano, fue documentada siguiendo el estilo impuesto por los realizadores mexicanos de la revolución.
La vertiente documental y realista fue, por razones claras, la principal manifestación del cine mexicano de la revolución. Aunque el cine de ficción comenzaba a popularizarse en Europa y Norteamérica, el conflicto armado mexicano constituyó la principal programación de las salas de cine nacionales entre 1910 y 1917.



EL CINE SONORO MEXICANO
A pesar de que el sonido se incorporó al cine en 1927, no fue sino hasta 1931 cuando se realizó la primera cinta sonora mexicana: una nueva versión de Santa, dirigida por el actor español-hollywoodense Antonio Moreno e interpretada por la ya mencionada Lupita Tovar.
Santa (1931) fue, la primera película mexicana que incorporó la técnica del sonido directo, grabado en una banda sonora paralela a las imágenes en la misma película. Esta técnica fue traída de Hollywood por los hermanos Roberto y Joselito Rodríguez, quienes habían inventado en Estados Unidos un aparato sincronizador de sonido muy ligero y práctico.







EPOCA DE ORO
La producción cinematográfica mexicana había alcanzado en 1939 un alto nivel. De hecho la época de oro comenzó años antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial, un factor muchas veces citado como causa directa de esta etapa.
Allá en el Rancho Grande (1936) de Fernando de Fuentes, fue el filme que encontró la fórmula comercial capaz de convertir al cine mexicano en una verdadera industria. Era un melodrama ranchero, con una historia semejante a la del filme mudo titulado En la hacienda (1920). La trama, ubicada en una idílica hacienda en una época indefinida, estaba matizada por canciones interpretadas por el galán Tito Guízar.


"EL CINE ES BUENO PARA LA SALUD"

Las películas sobre enfermedades conocidas ayudan a concienciar - Las que tratan de dolencias raras atraen fondos para investigar y buscar curas - Varias facultades de medicina utilizan largometrajes para formar a sus estudiantes

Alicia Fernández-Zúñiga, psicóloga clínica experta en tartamudez confiesa que iba al cine escéptica "porque los temas médicos no se suelen tratar [en el cine] con rigor, se hacen muchas concesiones. No es el caso de esta". Sostiene que la película es una oportunidad para divulgar. Recuerda que "nadie empieza a hablar tartamudeando" y recomienda: "Si su hijo sigue tartamudeando tres meses después de la primera vez, consulte a un experto porque existe un tratamiento preventivo eficaz".
Seguro que son muchos los que conocieron por primera vez a un autista, un leproso, un enfermo del sida, un esquizofrénico o un parapléjico en una película. Para entonces, sin duda ya habían oído hablar de esas enfermedades. Pero no de la adrenoleucodistrofia (ADL), conocida por los legos como "la enfermedad de El aceite de la vida", una enfermedad genética, una dolencia neurodegenerativa poco frecuente cuya prevalencia es de una en cada 20.000 personas. El uno en la película existió, se llamaba Lorenzo Odone, murió en 2008. Pero los protagonistas son sus padres, Augusto (encarnado por Nick Nolte) y Michaela (Susan Sarandon), que con un esfuerzo titánico inventaron un aceite que mantuvo vivo a Lorenzo, y a muchos otros, durante años. "Me pareció absolutamente fiel a la realidad, la parte clínica es muy fidedigna y el retrato psicológico, también", afirma Aurora Pujol. Una voz de lo más autorizada en esta enfermedad rara, pues esta investigadora del ICREA (el CSIC catalán), y su equipo son referentes mundiales en esta enfermedad. Solo unos 10 grupos estudian esta patología. Cuenta Pujol que el aceite con el que dieron aquellos padres tras horas y horas en bibliotecas -recuerden, Internet no existía entonces-, resultó "parcialmente eficaz, durante 15 años se ha estado tratando pacientes con él".
Esta investigadora, que colabora con el Ciberer (el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Raras), enumera los motivos por los que la película es ejemplar: muestra fielmente el trauma de los padres, esa incomprensión social y profunda soledad cuando los médicos no dan con el diagnóstico, no digamos ya con el tratamiento, o enseña cómo crear asociaciones; es útil también para los médicos, porque los primeros síntomas se pueden confundir con otras patologías y el diagnóstico se suele retrasar (y es al inicio cuando los tratamientos son eficaces). "El aceite de la vida se pasa en las facultades de medicina y de biología. Y nosotros se la ponemos a los alumnos de tesis, que trabajan con ratones transgénicos, para que vean adónde van sus investigaciones".
La película despertó el interés del público hacia una enfermedad rara, y eso, recalca Pujol, en países como EE UU con tradición de hacer donaciones privadas para la investigación, fue importante para recaudar fondos en busca de una cura. Dinero convertido hoy en tratamientos para enfermos de ADL: el trasplante de médula ósea y la terapia génica son eficaces en los peques (la segunda ha salvado a tres españoles), asegura Pujol, embarcada ahora en el primer ensayo clínico internacional con un cóctel de antioxidantes para enfermos adultos, que ha sido un éxito en ratones.
Cuenta García Sánchez que en varias universidades, incluida la de Salamanca, usan el cine en la enseñanza; él, desde hace 14 años. Philadelphia es un clásico en sus clases sobre el herpes o el sida. Está convencido de que cualquier estudiante que ve a Andrew (Tom Hanks) desabrocharse la camisa no olvidará jamás el sarcoma de Kaposi. "Vemos la película, discutimos la clínica...". La revista Medicina y Cine, cuatro números al año, bilingüe castellano-inglés, nació hace seis años.
Otras enfermedades no necesitan, como quien dice, presentación. Es el caso del cáncer. La española Cuarta planta es, explica Vanesa Jorge, psicooncóloga de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), uno de los títulos de una filmografía sobre la enfermedad que han elaborado para que los psicólogos puedan echar mano de ella cuando quieren escenificar una fase de la enfermedad. Las usan, por ejemplo, para recomendar a voluntarios. "A los enfermos no se les ponen, ni a sus familias, ellos ya lo están viviendo. El cine no es un instrumento terapéutico", afirma Jorge.
Álvaro Pastor, codirector de Yo, también, con Lola Dueñas y Pablo Pineda, precisa, de entrada, que, como insisten las asociaciones, el síndrome de Down "no es una enfermedad, es una alteración genética". Dicho esto, cuenta que "sin ser rosas o faltar a la verdad" él y el codirector, Antonio Naharro (que tiene una hermana Down), quisieron "ofrecer un punto de vista optimista porque el asunto lo merece". "Nos documentamos hasta el infinito" sobre esta alteración, insiste. Recalca que lograr financiación fue una odisea: "La discapacidad no le parecía interesante a nadie, decían que no era comercial". Resulta que la película hizo casi tres millones de dólares en taquilla en el extranjero, unos 400.000 en España. Pastor habla con envidia de cómo trata la discapacidad Hollywood: "Mira Forrest Gump, colocan a un discapacitado de protagonista y lo convierten en una historia de superación. Tengo la firme creencia de que el tema da igual, lo que importa es cómo lo cuentas".
Y si reflejar una enfermedad en pantalla es complicado, es complicadísimo cuando se trata de trastornos mentales. Eso opina Luis Muiño, colaborador del grupo Psicología y Cine. "Los psicólogos somos de los últimos reductos de la intimidad, y eso es más difícil de trasladar", afirma. "Si quiero hacer una película de bomberos, con hablar con ellos más o menos me entero de qué va. En cambio, un director necesitaría asistir a un año de psicoterapia para documentarse", opina. "Y eso no se va a dar". Muiño afirma, por eso, que nunca ha visto "nada parecido a una sesión real de psicoterapia ni en el cine ni en la tele". El inconveniente que ve, aunque entiende que es lógico, es que "la visión tiende a ser melodramática, el guión lo que busca es provocar sentimientos".
Miguel Gallardo lo ha vivido en primera persona. Reconocido autor de novelas gráficas, la que dedicó a su hija María, una chica con autismo que ahora tiene 16 años, acabó convertida en la película María y yo . Gallardo está muy satisfecho con el resultado. "Hemos recibido muchas reacciones. Lo llevamos por toda España y algunos países más. Ha sido una especie de ventana", declara.
El autismo se ha asomado periódicamente a la pantalla. Gallardo cree que el personaje que interpreta Dustin Hoffman en Rain Man estaba demasiado estereotipado, entre otras cosas porque se habían tomado rasgos de tres enfermos; sobre Alguien sabe demasiado, ironiza: "Los niños con autismo son muy buenos testigos, porque se fijan mucho y hablan poco...".


Pese a estas críticas, Gallardo cree que estos filmes tienen un efecto positivo. "Lo más difícil con el autismo es lograr la empatía del espectador, y con María eso se consigue desde el principio", señala. Existen otros beneficios, reconoce, pero, sobre todo, "que un trastorno o una enfermedad se pongan de moda hace que la gente le preste más atención". No es afán de protagonismo. "Para las enfermedades minoritarias, salir en una película o en un artículo de un periódico no cura, pero puede representar más fondos para investigación"

miércoles, 9 de noviembre de 2011

"PREGUNTAS CURIOSAS"... ¿QUE TANTO SABES DE CINE?


1.- ¿Sabes que es el cine?

2.- ¿Sabes que es la séptima fila?

3.- ¿Sabes cuál fue la película más taquillera?

4.- ¿Sabes cuál es la película con más errores?

5.- ¿Quién es el actor mejor pagado?

6.- ¿Cuál es la película con menos presupuesto?

7.- ¿Cuál es la película con más secuelas?



8.- ¿Por qué se le denomina “Oscar” a los reconocimientos otorgados por la “ACADEMY AWARDS”?

9.- ¿Cuántos premios Oscar se han entregado en más de 24 categorías?

10.- ¿Quién fue la primera actriz mexicana nominada al Oscar?

ARGELIA ZYANYA VAZQUEZ TAPIA

"CINE JAPONES"

UN POCO DE HISTORIA
Se ha marcado el 28 de diciembre de 1895 como la fecha del nacimiento del cine. Ese día en el Gran Café del Boulevard de los Capuchinos, en París, Louis y Auguste Lumière realizaron la primera proyección de cine: fueron 10 o 12 pequeños documentales que dieron inicio a lo que ahora conocemos como arte, industria y espectáculo.
Técnicamente el cine es una proyección sucesiva de fotografías impresas sobre una cinta, las imágenes en movimiento suceden debido a tres elementos que son: la fotografía, la proyección y la persistencia de la visión.
El cine japonés es una de las vertientes más especiales de la historia del séptimo arte. Sus temas se alimentan de su historia épica y trágica, de su espiritualidad ancestral o de su nueva realidad presente.

La cinematografía japonesa es muy compleja, esta llena de matices estilísticos y con una gran variedad de géneros, subgéneros y temas que han evolucionado rápidamente en el último siglo bajo dos grandes estigmas históricos: el peso de la tradición, folklore y hábitos sociales nipones y la gran necesidad de un vínculo comercial con la industria occidental.
El cine japonés comenzó cuando dos operadores de los hermanos lumiere, Gabriel Vayre y Constant Girel ruedan películas en directo con estilo documental: colocando la cámara sobre las calles y plazas de las ciudades de Tokio, Kioto y Osaka, esto evoluciono rápidamente hacia formas artísticas que trataban de rodar escenas de baile de las geishas en toda su complejidad y otros temas de gran tradición nacional.
Cuando los norteamericanos ocuparon el país las instituciones dictaron disposiciones que prohibían todos los filmes que exaltaran el feudalismo, el amor a la guerra y a las batallas, el nacionalismo, el militarismo y el culto a la venganza y destruyeron todas las que ya trataban de estos temas, se borro de la producción nacional cualquier alusión a tradiciones ancestrales, artes marciales, formas de vestir, o ideales marxistas, habituales en el periodo mudo.
LA FLOR DEL CINE JAPONES
A lo largo del desarrollo del cine japonés se han desarrollado variedad de géneros como lo son:
-Goraku-eiga: cine de entretenimiento
-Kaiju-eiga: cine fantástico, surgidas después del desastre de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki p/e Godzilla
-Bunga-eiga: tipo documental
-Ken-geki (película sable) o chambara: films de samuráis, subgéneros de los jidai-geki
-Yakuza-eiga: películas de gánster japoneses (mafia japonesa)
-Ninkyo-eiga: películas de caballería
-Ninja-eiga: espías asesinos
Por mencionar algunos. A finales de los 50´s el cine japonés sufrió una nueva regeneración, debido a la influencia de un movimiento literario llamado Taiyozoku (tribu del sol) se comienzan a realizar películas sobre las nuevas necesidades juveniles. Fue una especie de Nueva Ola (nuberu bagu) en la que los directores (Nagisa Oshima, Kiju Yoshide y Masahiro Shinoda) fundaron revistas donde criticaban la afectación expresiva de los autores anteriores y donde manifestaban su voluntad de atributar e imitar a los autores de la Nueva Ola Francesa.
En los años 80 el cine se renueva y conforma su moderno sistema empresarial, en este tiempo debido a la escasa oferta formativa los cineastas son en su mayoría autodidactas, lo cual dio como resultado dos géneros más:
-pinku eiga (ligero cine porno)
-original video
Los orígenes de la historieta en Japón se remontan al siglo VII a.C., cuando se importa desde China los Chôjûgiga o Rollos Animales, unas tiras de papel de hasta veinticinco metros de largo, que escenificaban situaciones y costumbres budistas de la época. Durante el período Edo (1600-1867) surgieron los denominados ukiyo-e, dibujos en que se representaba a las personas en situaciones y acciones populares de cada época.
Un gran innovador del ukiyo-e, Hokysai Katsushika, acuñó el término manga (man: «informal» y ga: «dibujo»). Osamu Tezuka, el gurú de la realización de cómics en Japón, creó el primer «mono» televisivo japonés Tetsuo Atom (Astro Boy); más tarde resultaron La Princesa Caballero ( Ribon No Kishi) y Kima, El León Blanco (Jungle Tatei), inspirados en los trabajos de Walt Disney: todos personajes de cómic que se trasladaron a la pantalla grande.
Después, vino la moda de los robots gigantes y los monstruos, desde Ultraman hasta los más recientes Power Rangers, sin olvidar a Mazinger Z (ideado por Go Nai para cómics) y sus aventuras intergalácticas junto al robot Afrodita A, que lanzaba sus pechos como Mazinger Z sus puños.
Tras este gran desarrollo surgieron Los Caballeros del Zodíaco, Sailor Moon, y DragonBall de Akira Toriyama, (1986), seguida de (Dragon Ball Z, 1989 y Dragon Ball GT, 1996), todas producidas por la Toei Animation.
HOY DIA
La situación actual del cine japonés es bastante crítica. Aunque el 50% de los espectadores ven filmes propios, el cine japonés sólo representa alrededor del 32% de la cuota de pantalla (año 2000) desde hace diez años, frente al 68% de la cuota norteamericana, a pesar de los casi trescientos títulos anuales producidos (282 en el 2000). El cine se impuso en Japón como el entretenimiento rey antes de la guerra y sobre todo entre 1945 y 1958, año en que alcanzó su momento álgido, con 1.120 millones de espectadores. A partir de ese momento, con la aparición de la televisión, esta cantidad disminuyó radicalmente. Las estadísticas más recientes indican una cifra de 162,2 millones de espectadores al año. De media, los japoneses acuden al cine 1,3 veces al año, es decir, más o menos tres veces menos que los franceses o los surcoreanos. Los ingresos anuales registrados ascendieron en 2010 a aproximadamente 220.000 millones de yenes (2.420 millones de euros) y con esta cifra Japón se consolida como un gran país de cine, ya que se sitúa justo por detrás de Estados Unidos. Esta situación contradictoria se debe ante todo al precio de la entrada: en Tokio e incluso en Osaka, la entrada normal puede alcanzar los 1.800 yenes, 1.500 yenes la entrada para estudiantes y 1.000 yenes la entrada para mayores de 60 años. Este precio compensa financieramente el descenso de asistencia a las salas. De media, la entrada cuesta 6,14 euros en Francia, 5,1 euros en Corea, 7,5 dólares en Estados Unidos y Japón se descuelga con su cara entrada a 1.217 yenes (es decir, 11,06 euros). Por tanto, podemos afirmar que la industria japonesa del cine se mantiene gracias al elevado precio de las entradas.
Sin duda alguna el cine japonés tiene aun mucho que mostrar al mundo sobre si mismo, sin embargo y a pesar de que existen diversas compañías productoras de cine, es necesario el apoyo por parte de la comunidad japonesa entera par hacer posible que el cine japonés sea mayormente reconocido día a día.
BIBLIOGRAFÍA
Schmidt noguera, m.: análisis de la realización cinematográfica. editorial síntesis,
Madrid, 1997, col. comunicación audiovisual.
Semana internacional de cine de valladolid: takeshi kitano. valladolid, 1998.
Tessier, m.: el cine japonés, acento editorial, madrid, 1999, col. flash.
Sedeño valdellós. Historia y comunicación social: cine japonés: tradición y condicionantes creativos actuales, 2002

"EL CINE MEXICANO EN LA ÉPOCA DE ORO"



Se considera época de oro para el cine mexicano la producción filmográfica entre 1936 a 1957, películas en blanco y negro rodadas en pequeños pueblos o más bien rancherías con temáticas amorosas; generalmente.  Elogiadas por su calidad y cantidad.

Es fácil disfrutar del séptimo arte cuando se es espectador de alguna de estas obras, me parece que el éxito que lograron conseguir  más allá de las fronteras del país radica en eso,  en que son filmes que se disfrutan, en su capacidad de atrapar al público en otra realidad  durante casi dos horas.
Una lista de ingredientes bien dosificados como lo son las actuaciones entregadas,  diálogos bien estructurados pero con apariencia de espontaneidad e historias creíbles que no dejan de ilusionar con la magia de los finales felices.

Fueron las actuaciones de hombres y mujeres que le dieron sentido  a la palabra interpretación  para el cine en México, desde los borrachos que bebían en la cantina del pueblo algunas veces para olvidar decepciones y que de paso nos hacían compadecernos de su dolor y olvidar los nuestros; o bien las mujeres altivas de belleza envidiable actuando que fingían una fortaleza inquebrantable y soberbia  para al final mostrarse reales y entregarse al amor;  fueron ellos quienes aportaron lo necesario para hacer de estas películas, películas de calidad y seguramente también, responsables de la forma como actualmente concebimos a  la cultura mexicana. 
La producción que nunca se mostró pretensiosa logrando así un mayor efecto en el público. La fotografía que sólo necesitaba a la mente que pudiera ver lo especial en lo cotidiano porque   México era todo un escenario listo para usarse. Y por último pero lo más importante, la razón de todos estos fenómenos: el creador de la obra.
La conjunción de estos factores así como otros externos  dieron como resultado el poder captar en 35 mm toda una cultura, la mexicana; mestiza, romántica, campesina, pobre, fiestera.

Nosotros, jóvenes generaciones ya sólo nos queda reconocer esa parte de nuestra historia como país  sumamente rica, sumergirnos en ese pasado nuestro  para poder mirar hacia el futuro y seguir creando.



"PELÍCULAS SNUFF"

Los filmes conocidos como películas snuff son aquellos en los que se presentan escenas de asesinato real, filmados con personas a las que se ejecutan y que a menudo suelen estar precedidas estas escenas de asesinato con violencia sexual. Aunque suele catalogar a este tipo de género como un mito, un intento de propaganda de los años 70´s; su existencia está a debate debido a la cantidad de películas y Films producidos en sitios underground de Estados Unidos.

Se tienen antecedentes de que el primer film perteneciente a este género data de 1970; entre los barrios de Nueva York donde el cine pornográfico abarrotaba las salas de proyección clandestinas, la película Snuff,  inspirada en la matanza perpetrada por la familia Manson, adquirida por el productor Allan Shackleton la adquirió y posteriormente le añadió al final de la cintan una supuesta escena de sexo donde destripaba a su victima mientras un cómplice lo filmaba en el acto.

Posteriormente y con la explosión generalizada del morbo en películas de este tipo es cuando se comienzan a producir imitaciones de este género dentro del cine underground hasta en Hollywood. Un ejemplo es la cinta elaborada por el matrimonio Michael y Roberta Findlay en argentina en la cual se mostraba violencia y asesinato; aunque sería demostrado posteriormente como falsa no dejó de causar sensación de malestar entre la sociedad que había presenciado la cinta.

Dentro del cine Hollywoodense podemos encontrar numerosas versiones de lo que se trata de explicar e interpretar el mito del snuff; por ejemplo: 8mm interpretada por Nicolas Cage; Tesis de Alejandro Amenabar.

Sin embargo nunca se ha podido encontrar una cinta donde se muestre un asesinato que sea autentico siente este tipo de film considerado como un mito; sin embargo actualmente se presentan numerosas video grabaciones en donde personas son ejecutadas por terroristas o incluso asesinos perpetran crímenes; un ejemplo son los asesinos de Ucrania quienes son 4 jóvenes que filman su asesinato a una persona matándolo  con un destornillador y un mazo.

Es claro que este género aunque grotesco, ha tenido un impacto en la sociedad siendo incluida en películas de acción, programas de detectives e incluso en videojuegos cuyo principal propósito no es alimentar el morbo de la gente a la violencia sino obtener dinero a través de una jugosa leyenda que mantiene al espectador intrigado y a la vez perplejo.


Hugo nava  
resumen 

"EL SÉPTIMO ARTE"

El cine es un arte el cual se encarga de proyectar imágenes (fotogramas) de una forma rápida y consecutiva para así poder crear la impresión de que los objetos están en movimiento, a través de un film o vídeo.
Comenzando sus inicios, atreviéndome a añadir,  con la aparición del taumatropo  y el zootropo los cuales en el caso del primero eran usados como juguetes y de allí se viene la idea de crear algo más complejo como la proyección de un film.
La historia del cine como hoy en día la conocemos comenzó el 28 de diciembre de 1895, en la cual los hermanos Lumiere proyectaron la primera película públicamente, por así decirlo ya que solo se veía la salida de unos cuantos obreros de una fábrica, la demolición de un muro, entre otras.
Debido al éxito que esto significo los hermanos Lumiere llegaron a proyectar hasta 500 películas por año, impresionante aunque con la llegada George Melies al introducir las historias ficticias a este ámbito, revoluciono el modo en como el cine se veía en aquellas épocas y con lo cual el publico quedo fascinado.
Ya para 1927 se introduce la primera película con sonido, pues vale recordar que todo era “mudo”, la cual se llamo El cantante de jazz, y que para ese mismo año Paramount Pictures introdujo el doblaje; ya con el paso de los años el color se introdujo en el año de 1935.
Es más que claro que el cine  ha ido evolucionando hasta convertirse en lo que es hoy en día y que lo seguirá haciendo y claro que el día de mañana será toda una nueva experiencia fantástica…

Eder Jovvany Cabrera Hernández.
Columna.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Three... Extremes



Three… Extremes
Por Andrea Calderón Méndez
Reseña Critica

Título original: Saam Gaang Yi
Año: 2004
Director: Fruit Chan, Park Chan-Wook, Miike Takashi
Género: Terror
Duración: 118 minutos
Productora: Coproducción Japón, Corea del Sur, Hong Kong
Intérpretes: Kyoko Hasegawa, Atsuro Watanabe , Byung-Hun Lee, Hye-Jeong Kang, Won-Hie Lim, Bai Ling, Tony Leung Ka-Fai, Miriam Yeung Chin Wah

Three… Extremes, cinta conformada por tres historias independientes, producidas en tres países diferentes y por tres aclamados directores del cine asiático. Tres historias de alrededor de 40 minutos que conforman una cinta imprescindible e inquietante…

El primer episodio de esta cinta es Dumplings, dirigida por Fruit Chan (Hong Kong) creador de la cinta Made in Hong Kong. La historia es acerca de una ex actriz que en busca de una forma de no envejecer encuentra a una “joven” que cocina unos peculiares dumplings (“empanadilla” china de masa fina y hervida) que dotan a su consumidor de unos milagrosos resultados pero estos dumplings constan de un misterioso y perturbador ingrediente.

El segundo relato es Box dirigida por Takashi Miike (Japón), conocido como el Tarantino oriental y creador de las cintas Dear o Alive y Audition. La protagonista es una joven escritora atormentada por extraños sueños y un sentimiento de culpa, todo esto originado por un pasado aterrador que involucra a su padrastro, a su hermana gemela, un circo ambulante y unas extrañas cajas.

El tercer y último episodio es Cut dirigida por Park Chan-Wook (Corea del Sur) responsable de cintas como Mr. Venganza y Oldboy. La historia gira en torno a un director de cine que es secuestrado junto con su esposa por un extra; este ata a la esposa al piano y cortara sus dedos cada cinco minutos a menos que el director asesine a un niño que el extra ha traído consigo.

Con narrativa simple, buenas actuaciones, historias  peculiares y originales. Una visión del terror a través de tres perspectivas, tres relatos que intentaran a su manera perturbar y desequilibrar la mente de los espectadores. No es como las cintas normales de terror, esta tiene un significado más profundo al buscar la creación del miedo más complejo.


Dilemas, envidias y obsesiones que llegaran a los extremos...